Ayer, el Foro Social hizo públicas 12 recomendaciones para impulsar el proceso de paz, que son el resultado del trabajo desarrollado por diversos agentes sociales y políticos los pasados 14 y 15 de marzo.
Antes de entrar a valorar esas 12 recomendaciones, cabe hacer una primera reflexión: una parte de la sociedad vasca (no me atrevo a cuantificarla) no percibe una necesidad de impulsar ningún proceso de paz, para esa parte de la sociedad, la paz llegó el 20 de octubre de 2011 y poco o nada más queda por discutir salvo la ubicación de los zulos y los militantes de ETA.
Hago esta primera constatación para describir, al menos desde mi punto de vista, quién puede darse por aludido por estas recomendaciones.
No me cabe ninguna duda de que quienes han pensado, discutido y redactado las consideraciones lo hacían Urbi et Orbi, pero de la misma manera que los mensajes del Papa no inciden más que en sus fieles, los del Foro Social sólo tendrán algún efecto en sus participantes.
Podemos afirmar por lo tanto, que el principal destinatario de estas recomendaciones es aquel para quien las mismas no están de más, es decir, quien percibe la necesidad del impulso de ese proceso de paz.
Es más, de momento, solo la izquierda abertzale se ha posicionado de manera inequívoca sobre la bondad de estas recomendaciones subrayando su importancia y la conveniencia de su observancia.
Sin embargo, la izquierda abertzale también sabe que ese mensaje solo tiene efecto en sus propias filas, por lo tanto, la pregunta es evidente: ¿cabe concluir que la izquierda abertzale está pidiéndole a ETA que atienda estas recomendaciones aunque de manera indirecta?
Si es así, bienvenido sea, y más aún si la propia ETA y el EPPK se muestran dispuestos a seguir esas recomendaciones, ya que en ese caso, es muy posible que nos encontremos ante una nueva hoja de ruta que aunque, de momento, puede que siga siendo unilateral, en un futuro es posible que sea la buena para todos.
Y digo la buena para todos, porque las recomendaciones del Foro Social son efectivamente, lógicas, razonables y van muy en la línea de otros contextos internacionales.
Es cierto que he echado de menos una 13º en la que se le recomiende a ETA que se disuelva, pero también entiendo que esa 13º podía haber invalidado las 12 anteriores para la propia ETA, y que si las 12 anteriores ocurren la última caerá por su propio peso.
Lamentablemente, parece que ningún gobierno (a los que por cierto no se cita) va a dar ningún paso en la dirección que recomienda el Foro al menos hasta que la propia ETA vaya resolviendo sus propios problemas, pero antes o después tendrán que avanzar para poder cerrar este capítulo tan negro de nuestra historia y éste puede ser un buen camino.
De toda la gama de colores que hay en política, la opción que mejor "casa" con mi ideología es IU. Cierto que es que no al 100%, pero pongamos que a un 80%.
ResponderEliminarAyer tuve una de esas reuniones en el partido de las que sales con cierto dolor de cabeza, debido a que quieres transmitir algo que nadie entiende (o no quiere entender), y el tema que tú estás tratando me viene como anillo al dedo para explicar la situación.
Hay una clara disonancia entre la forma de expresar ideas que tiene la clase política y el resto de humanos mundanos y corrientes. No puedo entender que para la definitiva desaparición de ETA haga falta proceder con una hoja de ruta y una serie de recomendaciones. Yo sólo entiendo la número 13.
Entiendo que en este conflicto ha habido muchos puntos de vista y lo que, para unos son presos políticos, para otros terroristas y, para unos terceros, unos zumbados sectáreos (yo ando entre las tres). Y también comprendo que los gobiernos del PP y el Psoe no han sabido gestionar la situación bien.
Pero, lo obvio, lo objetivo, es que ETA ha matado a personas por pensar como ellos querían, eso no está bien (y lo opina el 90% de los vascos/as) y deberían desaparecer de una vez. El resto, para mí, es paja.
Eso sucede en IU en muchas ocasiones: Se habla de lucha obrera y de clases, de plusvalía, de medios de producción y demás tecnicismos que, a pesar de todavía poder ser actuales, alejan de la concreción del objetivo deseado bajo capas y capas de tesis.
Tesis, antítetis, síntesis. Ese el camino.
Por ello, no dudo de tus buenas intenciones y tu óptimo trabajo en la comisión del proceso de paz cuando estuviste en el parlamento, pero sí creo que la ciudadanía, en este y en otros temas, debería recibir mensajes más consensuados y contrastados y, sobre todo, más directos.
"Se breve y vencerás" es mi máxima. Por eso me callo ya...
Txema